lunes, 1 de noviembre de 2010

DIFUNTOS

Dirigíanse las gentes por las calles en gran número y larga procesión, serpenteando de unas en otras como largas culebras de infinitos colores: ¡al cementerio! ¡al cementerio! ¡Y para eso salían de las puertas de Madrid! Vamos claros, dije yo para mí, ¿dónde está el cementerio? ¿Fuera o dentro? Un vértigo espantoso se apoderó de mí, y comencé a ver claro. El cementerio está dentro de Madrid. Madrid es el cementerio. Pero vasto cementerio donde cada casa es el nicho de una familia, cada calle el sepulcro de un acontecimiento, cada corazón la urna cineraria de una esperanza o de un deseo (...).
-¡Necios! -decía a los transeúntes- ¿Os movéis para ver los muertos? ¿No tenéis espejos por ventura? ¡Miraos , insensatos, a vosotros mismos, y en vuestra frente veréis vuestro propio epitafio! ¿Váis a ver a vuestros padres y a vuestros abuelos, cuando vosotros sois los muertos?
Ellos viven, porque ellos tienen paz; ellos tienen libertad, la única posible sobre la tierra, la que da la muerte; ellos no pagan contribuciones que no tienen; ellos no serán alistados ni movilizados; ellos no son presos ni denunciados; ellos, en fin, no gimen bajo la jurisdicción del celador del cuartel; ellos son los únicos que gozan de libertad de imprenta, porque ellos hablan al mundo. Ellos, en fin, no reconocen más que una ley, la imperiosa ley de la naturaleza que allí los puso y a ella obedecen.
Día de Difuntos de 1836. Mariano José de Larra

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Y...?

David dijo...

Prefiero alguno que le leí de crío en el que alguien venía a pedirle consejo para ser escritor, o algo parecido. Tenía un tono más humorístico.
Yo prefiero celebrar que estoy vivo.
La foto me gusta.
Un saludito.

atikus dijo...

No me estraña que acabara así el chico con esos pensamientos...

Pues yo estoy muerto despues de la noche de fiesta de Halloween, es que ya estoy mayorcito para acabar a las tantas disfrazaato de mequetrefe ;)

besitos con colmillos

Pardi dijo...

Un genio.... han pasado más de 100 años y se puede aplicar a cualquier época. Salu2

David dijo...

Yo iba a decir lo mismo que Atikus...pero he preferido callármelo.

Licantropunk dijo...

Sepulcros blanqueados somos.
"Esto es jalogüin, esto es jalogüin", cantaban los paisanos de Jack Skellington. Si en el cine esa fiesta de disfraces no sería nada.
Quedan los templarios saliendo de sus tumbas en "El monte de las Animas" de Becquer, contemporáneo de Larra. Leer aquello, en silencio, a medianoche, de niño. Aquello sí que daba miedo.
Saludos.